Capítulo 104 Asumir las consecuencias
Samuel estaba preocupado por la lesión de Natalia. Ni en un millón de años esperó que ella rechazara su ayuda con tanta frialdad. Sin embargo, su brazo pasó por debajo de la rodilla de Natalia y la levantó en brazos antes de caminar hacia su auto.
—¡Samuel Bonilla! ¡Bájame ahora mismo! ¡Oye! ¿Estás escuchando siquiera lo que estoy diciendo? ¡Idiota! Claro que me escuchas gritar en tu oído, pero, ¿por qué finges no hacerlo?
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