Capítulo 1187 No más secretos entre nosotros
Leonor hizo una mueca de dolor y se tocó la mejilla palpitante. El dolor era intenso, casi insoportable. En silencio, dio gracias a Dios por haberse caído después de ir al baño. Si se hubiera caído mientras se ponía la bata, se habría sentido muy avergonzada, como si hubiera perdido toda su dignidad.
—Está bien, sólo necesito recostarme un rato. —No era tan frágil, y una caída no empeoraría su estado. Acostada en la cama, se tapó con la fina manta, apartando la vista de Teo—. Deberías descansar, estoy bien. —La presencia de Teo incomodaba a Leonor. Prefería estar sola, disfrutando de un poco de paz y tranquilidad.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread