Capítulo 312 Ella también te echa de menos
A las ocho de la tarde, un Rolls Royce negro se detuvo frente a un edificio residencial. Tras abrirse la puerta, la figura de Adán apareció bajo la oscura noche. Luego, Julio descendió del auto, sacó algo y siguió a Adán. Tal vez Sonia nunca hubiera pensado que la persona que buscaba estaba delante de sus narices, en Zona Brillante. Como decía el refrán; el lugar más seguro era también el más peligroso. No se equivocaban.
Dentro del edificio, una joven estaba preparando la fórmula del pequeño. Cuando vio a Adán, saludó:
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