Capítulo 40 Nadie puede controlarme
Adán no quería a los niños y estaba a punto de perder su ventaja, pero por suerte, una oportunidad de oro «la Familia Buenrostro» estaba delante de sus ojos. No tenía intención de dejar pasar esta oportunidad que había llamado a su puerta.
—¡Tío Genaro!
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread