Capítulo 348 Los celos de Santiago
Maya llegó al complejo termal alrededor de media hora después de la partida de Santiago. Cuando notó mis marcas, bromeó:
—Vi una camisa blanca y un par de pantalones de hombre junto a la piscina. Al parecer, pertenecen a cierto caballero que solía ser frío e indiferente. ¿Hace cuánto que no tenían un encuentro íntimo? Creo que se estuvieron divirtiendo mucho. Vaya, vaya, ¿llegué en un mal momento?
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread