Capítulo 488 Porque eres mía
Santiago no respondió, por lo que me acerqué y me senté a su lado. Entonces lo vi cliquear sobre el icono de una aplicación en la que yo guardaba mi diario íntimo, un programa que había descargado hacía años y al que raras veces accedía. Cuando era más joven, solía llevar un registro diario de mis pensamientos y sentimientos allí, pero en ese momento llevaba años sin abrirlo. La única razón por la que seguía ahí era porque, por simple curiosidad, lo había vuelto a instalar un día, pero tras abrirlo y ver que lo único que había eran textos aburridos, lo había cerrado. Sin embargo, no había leído muchas páginas; Santiago, por el contrario, fue directo hasta las últimas.
La primera reseña decía: «Hoy fue mi primer encuentro con él. Su presencia fue como un sol radiante que se llevó el frío y la humedad que hay siempre en Bristonia. Como resultado, sentí una calidez reconfortante».
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread