Capítulo 35 Ya no te amo
Me apuré a levantarme y acomodarme los piyamas. Al pie de la cama se encontraba un hombre con una expresión casual en su rostro. Nicolás era el único que podía hacer algo tan descarado como esto; Cristóbal jamás haría algo así. Él alzó una de sus cejas y preguntó:
—¿No soy bienvenido? —Se expresó como si tuviera el derecho a hacer esa pregunta.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread