—¡Qué suerte tiene! Ni siquiera ha muerto por esto —exclamó el príncipe heredero mientras examinaba el brazo amputado. Su rostro mostraba una mezcla de sorpresa y asombro. No esperaba que ni siquiera un cohete antitanque hubiera logrado acabar con Avelino.
—Sobrevivir es una cosa, pero como francotirador manco es prácticamente inútil —comentó Mateo.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread