Capítulo 1048 ¡No es más que un bárbaro!

En cuanto Franco llegó a casa, se apresuró a mezclar el antídoto con agua y se lo dio a todos. En cuanto lo bebieron, todos se percataron de que sus síntomas habían desaparecido al instante. Eso los dejó muy sorprendidos y se preguntaban de dónde había sacado Franco un elixir tan milagroso. Franco les dijo que conocía a un médico piadoso que le recetó el medicamento. Nadie sospechó de lo que les dijo y los miembros de la familia estaban muy agradecidos con él. Eso hizo que su estatus dentro de la aumentara de nuevo. Algunos incluso proclamaron que él sería más adecuado para convertirse en el jefe de la familia. Todo eso lo hizo emocionarse, puesto que pensaba que tenía todo bajo su control. Así fue como la noche transcurrió tranquila.