—¿Qué demonios te pasa? —Dante arrugó las cejas al verla.
Adriana no dijo nada mientras miraba su móvil. Él siguió su mirada y se dio cuenta de que seguía zumbando y la pantalla de identificación de llamadas parpadeaba. Lo colgó y apagó el móvil.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread