Capítulo 133 Eso fue un robo, no hay duda
En el baño, Adriana se estaba echando agua fría en la cara en un intento desesperado por calmarse. Mientras recordaba el incidente de esa noche, estaba por completo desconcertada por lo que había sucedido.
Miró su teléfono e identificó el número de contacto guardado como «Gigoló en Deuda», vacilando, reflexionó sobre si llamarlo. Después de todo, tenía que mantenerse firme con la decisión que tomó ese día. Desde entonces, ella no lo había contactado.
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