La herida que Miguel tenía en la comisura de los labios aún estaba en carne viva. Sin embargo, no dejó que eso lo distrajera mientras se llevaba a Adriana de allí.
Su corazón aún latía con fuerza por la adrenalina mientras acercaba el pájaro a su pecho.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread