Capítulo 133 Amarte es mi condena: ¡él es incapaz!
Los mineros se organizaron y escogieron a tres personas, los hombres de más edad, y con mayor experiencia en esas cosas, de inmediato esos individuos escoltados por los hombres de Arismendi se aproximaron a la camioneta.
—Doctor, escuchamos su propuesta.
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