Capítulo 198 Fabián González

Mientras aguantaba el impulso de matar a Rachel allí mismo, los discípulos del Departamento Disciplinario trajeron múltiples frascos que contenían los ciempiés que Milena y el resto tenían que ingerir. Los ciempiés eran la esencia de la Reliquia de la Muerte. Además, vivirían dentro de sus cuerpos y se alimentarían del antídoto. Por esta razón, tenían que tomar el antídoto cada siete días, o la toxina haría efecto. Aunque el Sutra del Corazón de Nube Auspiciosa podría ayudar a la desintoxicación, no podría eliminar la toxina en tan poco tiempo si hacía efecto. Después de presenciar cómo se tragaban el ciempiés, Rachel se marchó con una sonrisa de satisfacción en el rostro. La multitud no tardó en salir de mi casa y tampoco se quedó ninguno de los superiores que solían cortejar a Rosalí. «Las personas solo se acercan a otros cuando tienen algún interés; esa es la dura realidad».