Capítulo 91 Mentira
La ganancia del día había sido sin duda muy beneficiosa para nosotros. No solo habíamos conseguido semillas de Rododendro, sino que también habíamos logrado apropiarnos de un libro de literatura médica. Con esto habíamos suplido en su totalidad nuestra escasez de suministros médicos.
Recibí con beneplácito a Horacio y Estela y conseguí que se quedaran a comer un plato de guiso de carne como muestra de la hospitalidad del anfitrión. A la mañana siguiente, los despedí, mientras Gonzalo se encargaba de que dos hombres repasaran a fondo el libro para que pudiéramos dominar su contenido cuanto antes. Ellos habían sido alumnos aventajados que querían entrar en la facultad de medicina, por lo que, como era obvio, eran los más indicados para esto.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread