Capítulo 810 Cola que me pisen

«A lo largo de los años en que Lázaro dirigió un negocio en el país, se le consideró un empresario formidable. No es una tarea sencilla sacarlo y destruir el imperio empresarial que ha construido aquí. Sin embargo, si se le deja solo, no solo afectaría al Grupo Cruz, sino que también crearía una ruptura entre el Señor Cruz y su esposa. Creo que no tengo otra opción. Tengo que hacerlo a pesar de su dificultad. Para ser franco, estos dos hombres nunca se habrían cruzado si no se hubieran enamorado de la misma mujer. Tal vez incluso se habrían convertido en socios comerciales si eso no hubiera ocurrido. Pero, por desgracia, el amor es a veces más cruel que el mundo de los negocios». En un abrir y cerrar de ojos, ya eran las diez de la noche mientras las luces de la ciudad llenaban el oscuro cielo. Isabel se sintió un poco sola cuando miró la habitación vacía y algo oscura.