Capítulo 110 Se escapa

Susana se quedó en blanco cuando notó que Esteban le arrancaba la ropa. Ante ese ataque inesperado, la mente de ella entró en modalidad de defensa, así que de forma casi automática, Susana metió su dedo índice y corazón en los ojos de su exmarido, a la par que le estrellaba la rodilla en su entrepierna con todas sus fuerzas. Esteban se llevó las manos a los ojos con un grito de dolor y cerró las piernas para proteger la delicada zona que ella había golpeado. La mujer había conseguido zafarse de su ataque, pero se quedó clavada en el suelo sin poder controlar los temblores que habían hecho presa de su cuerpo.