Capítulo 62 ¡Lo recuerdo!

Cuando el coche al fin se detuvo, Susana se dio cuenta de que habían llegado a un restaurante muy exclusivo. El lugar se encontraba en los suburbios de la ciudad, lejos del barullo del resto de la urbe, por lo que la atmósfera del restaurante emanaba serenidad. Desde el exterior, se veía como una villa normal; sin embargo, una vez dentro parecía un mundo completamente diferente. Su arquitectura estaba llena de pabellones, terrazas y amplios pasillos. Con la tenue luz de las lámparas, el sonido del fluir del agua bajo las ventanas y el croar de las ranas, el lugar parecía un escenario de cuento. Si estuviera con otra persona, Susana se sentiría feliz; después de todo, la barroca ambientación Chanam del restaurante era uno de sus estilos favoritos. Sin embargo, la persona a su lado se trataba de Samuel, aquel de quien sospechaba que era el padre biológico del Pequeño Colin. Una vez en la mesa, Susana tomo un vaso de agua caliente que acercó a sus labios para dar un sorbo.