Capítulo 11 Una gran postura

Ruperto tenía 8 años de conocer a Zirán. Nunca lo había visto mirar a una mujer durante más de un minuto, a menos que fuera para hablar de negocios. Por eso, él y los otros tres asistentes especulaban en privado que a Zirán no le interesaban las mujeres y que prefería a los hombres. Por lo tanto, se alegró de que Zirán mostrara al final interés por una mujer. Eso significaba que él y sus colegas podían estar tranquilos. Ya no tenían que preocuparse de que su jefe pudiera estar interesado en ellos.