Capítulo 409 Es demasiado tarde
La expresión de Melina era fría y Queta percibía el peligro inminente que enfrentaba. Suspensa de una rama de un árbol y tambaleándose en el borde, era consciente de que sería la primera en caer. Debajo de ella se extendía un profundo abismo sin ramas que pudieran interrumpir su descenso. Otra caída no le otorgaría la misma suerte esta vez.
—Melina, te pido disculpas. Cometí errores influenciada por los beneficios ofrecidos por la familia Vergara en aquel entonces, lo cual me llevó a tomar decisiones apresuradas. Reconozco mis equivocaciones, y estoy dispuesta a cambiar. Por favor, dame una oportunidad para enmendarme.
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