Capítulo 407 Te hare responsable si Isa no es feliz

El viaje de la Organización Ferreiro a la casa de los Lafuente no era largo. Tomaba entre veinte minutos y media hora. Pude haberme ido en auto a la casa y comer ahí. Sin embargo, era hora de la cena. Abue estaba preocupada de que tuviera hambre. Roberto le indicó al chofer que manejara despacio. Sostuvo el termo por mí. Apuesto que si pudiera me daría de comer él mismo. Me protegía como un tesoro nacional. Era afortunada de saber cuánto me quería abue. Y aún lo seguiría haciendo después de tener al bebé. De eso estaba segura. Sin embargo, Roberto era un asunto completamente diferente. Mis sentimientos hacia él eran de incertidumbre y ansiedad.