Nadie confesó. Las secretarias titubearon y negaron que estuvieran involucradas.
―Yo no bebo ese tipo de té ―dijo una―. Todos saben lo flaca que estoy. ¿Por qué tomaría té para perder peso?
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread