Capítulo 814 ¡No es un partido!
Sentados en los asientos de la audiencia, Adrian y los demás tenían las cejas levantadas. Sin duda eran hábiles artistas marciales, pero al mismo tiempo eran simples mortales. Si les dispararan, incluso con su destreza marcial, no podrían resistir una bala.
Los ojos de Adrian parpadearon mientras le daba instrucciones a Bronte: "Bronte, vigila a esa persona y asegúrate de que no dispare al escenario".
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