Capítulo 358 El precio de hacer mal

Durante los últimos diez años, Kevin había luchado en numerosas batallas sangrientas. Había participado en casi 1,000 batallas de diferentes escalas y había sufrido innumerables heridas. Para él, las heridas comunes como cortes de cuchillo o heridas de bala eran parte de su vida diaria, sin mencionar todo tipo de quemaduras, congelaciones y lesiones corrosivas que habían dejado numerosas cicatrices en su cuerpo. Por un lado, así fue como se destacó en acción y se convirtió en Ares, el Dios de la Guerra, temido por sus enemigos. Por otro lado, sin embargo, esto también fue la razón por la cual Alice estalló en lágrimas de angustia cuando vio su cuerpo por última vez. Después de pasar por tantas pruebas, tenía una constitución mucho más fuerte que una persona común. Para él, el taekwondo de Calvin no era muy diferente de una cosquilla. Sin embargo, Calvin no sabía estas cosas, así que sintió que su mundo se había vuelto del revés. Con una expresión de incredulidad, gritó a todo pulmón: "¿¡Qué truco usaste?! ¿Cómo es posible que no sufras ninguna herida? ¡No lo entiendo! ¡No puedo entenderlo!"