Capítulo 638 Buscando mano de obra

Rupert sentía que se enfurecía mientras golpeaba el sofá. Aunque no había perdido su racionalidad, podía sentir que sus nervios estaban a punto de colapsar. "¡Maldición! ¡Estos jefes son unos verdaderos desgraciados!" Maldijo entre dientes mientras marcaba los números de algunos subordinados de rango inferior, mientras seguía murmurando para sí mismo, "No puedo creerlo. ¡Ni siquiera estos pequeños pececillos contestan mis llamadas!"