Su madre tenía razón. En el momento en que Claudia dijo lo que pensaba, Alejandro bajó la guardia. Como ella le había salvado la vida, siempre la tendría cerca. Por no mencionar que Victoria ya se había ido, así que Claudia tenía cinco años por delante. Pensó que podría convertirse en la amante de Alejandro algún día si aprovechaba su oportunidad y hacía bien sus movimientos.
Sin embargo, no esperaba que se mantuviera firme en su decisión durante cinco años. Incluso después de cinco años, seguían siendo amigos. Nada más. Cada vez que ella intentaba cruzar esa línea, él la detenía. Cada vez que eso ocurría, ella tenía que dar un paso atrás y buscar otra forma de avanzar.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread