Capítulo 272 Tengo algo que decir

Por la tarde, Victoria fue a recoger a sus dos hijos al colegio a la hora habitual. Volvió a fijarse en el coche negro cuando salían del colegio. Había cambiado de plaza de aparcamiento, pero permanecía allí en silencio. «Quizá pertenezca a otro padre», pensó, dándose cuenta de que quizá había estado pensando demasiado antes. Debido a su apretada agenda, aún no había tenido tiempo de comprarse un coche. Sin embargo, ahora que lo pensaba, ir andando a todas partes le llevaba bastante tiempo. Así que pensó que sería mejor tener un medio de transporte. De lo contrario, sería un inconveniente para ir a recogerlos al colegio.