A pesar de que Victoria había rechazado a Claudia el día anterior, esta igual insistía en llevarle la comida. Mientras Victoria la observaba actuar como una buena persona, no pudo evitar encontrarlo divertido. Si bien no quería exponer a Claudia, tampoco quería hacerle un reconocimiento.
—Victoria, debes estar débil por la enfermedad. Te preparé un poco de caldo de pollo. ¿No quieres probarlo?
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