Capítulo 297 No traicionar nunca a una mujer
Graciela tomó un taxi hasta el Grupo Central. Nada más bajar, los periodistas salieron corriendo de la nada y la rodearon. Le hicieron casi las mismas preguntas.
—Sra. Rangel, la Sra. Gaitán afirmó que usted había matado a su madre. ¿Es eso cierto?
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread