Capítulo 119 Una amiga real
Me encontraba en un mar de mentiras cuando ni siquiera Serkan llevaba un día viviendo en la casa. Fue allí cuando pensé, si realmente era buena idea ayudar a alguien cuando tendría que decir muchas mentiras, unas que quizás, no sería capaz de recordar todas.
Desesperada por encontrar alguna excusa que me ayudará a justificar mi actitud extraña, hago un recorrido visual del lugar, en busca de alguna ayuda, hasta que Dios se apiada de mí y me da la excusa perfecta.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread