Capítulo 549 Secuestro
La figura alta y atractiva desapareció entre la multitud. Sandra lucía una sonrisa inocente en su rostro al verlo desaparecer entre la multitud. «¡Se siente tan bien ser mimada! ¿No estoy siendo un poco traviesa?». Sacó la lengua y siguió lamiendo la paleta que tenía en la mano. El helado era dulce y delicioso. Estaba ocupada comiendo la paleta en el banco mientras Abel compraba palomitas. Ninguno de ellos se dio cuenta de que el peligro se acercaba despacio a ellos.
¡Aaah...Mmmh....! Sandra apenas pudo gritar pidiendo ayuda, sus ojos redondos se abrieron de par en par por el shock y luego por el horror. Al final, se desplomó con debilidad en el suelo. Se desmayó y perdió el conocimiento. La paleta de sabor que tenía en la mano, cayó y se desparramó por el suelo como una floreciente flor morada.
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