Capítulo 484 Villa de lujo
Abel se recargó de manera perezosa en su auto, riendo entre dientes del otro corredor y su jefe.
—¡Oh! No sabía que fueras tan mal perdedor, Joven Escobar. —Abel se burló del jefe que acababa de perder dinero. —¡No apuestes si no tienes dinero! ¿Cuál es el punto de todas maneras? —Este tipo había apostado en su contra una y otra vez, pero siempre salía como el perdedor.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread