Capítulo 342 Quiero ir a casa
Si alguien me entrevistara ahora mismo y me preguntara cómo me siento, lo más seguro es que maldijera a los médicos. Ellos fueron la razón por la que tomé todas esas decisiones extremas y planeé mi muerte mientras me distanciaba en secreto de Cristofer. Tuvimos suerte de que él fuera persistente y me buscara. Si no lo hubiera hecho, podríamos habernos perdido para siempre.
De hecho, si hubiera sido incluso un poco menos firme... podría haberse casado ya con otra persona y haber tenido un hijo para cuando me enterara de que estaba en verdad bien. Cristofer me sujetó la mano y evitó que me moviera demasiado. Luego, señaló la bolsa de suero que tenía pegada a mí y me dijo:
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