De nada, somos amigos
Los labios de Tirso Cabrera se curvaron levemente al percibir sus preocupaciones, y una sombra de tristeza cruzó su corazón.
"Arturo, está bien, solo dime la verdad. Ya soy adulto y puedo entender que mi padre se haya vuelto a casar. Estoy preparado para aceptarlo", dijo Tirso Cabrera con naturalidad, mirando a lo lejos. "Solo... quiero saber cómo ha estado mi padre todos estos años... ¿Está bien?"
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread