Capítulo 2087 Sin rencores

—No tiene por qué culparse, Señor Zárate. A decir verdad, Tadeo y yo no estamos emparentados por la sangre. Para dejar mi ciudad natal y formar el Ejército del Norte, tuve que competir por la herencia de mi familia. Por eso adopté a Tadeo y afirmé con falsedad que era mi hijo. En realidad, ni siquiera lo conozco —explicó Baco. El sentimiento de culpa de Román desapareció de inmediato después de escuchar al hombre. Cuando el grupo llegó por fin a Muraco, ya había anochecido. Ahí se celebraba una fiesta con hogueras para festejar el trascendental día y los miembros del clan bailaban vestidos con trajes tradicionales. Incluso Jazmín bailaba entre los demás miembros del clan. Sus movimientos eran tan elegantes que rápido se convirtió en la bailarina más llamativa de aquella noche.