Jaime sonrió sin decir nada. Tampoco se había dado cuenta de que sus atributos físicos habían llegado a ese estado.
«Supongo que la píldora para calmar el cuerpo que me dio Ramón es cien veces mejor que mis píldoras revitalizantes».
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread