Capítulo 4481 No puedes hacerme daño
A pesar de enfrentarse a un cultivador altamente capacitado como Milo y encontrarse en desventaja numérica, Jaime no mostró indicios de temor. Era consciente de las diversas opciones a su disposición. Conservaba el Devorador Celestial, el unicornio de fuego, el Arco Divino, la Campana del Dragón, además del Señor Demonio Bermellón que residía en su campo de conciencia.
Con un rugido atronador, toda la energía contenida dentro de Jaime se liberó en una ola abrumadora, expandiéndose hacia fuera como un tsunami. En ese instante fugaz, su aura se intensificó notablemente.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread