Jaime miró a Dimas con desdén y le dijo:
—¿Por qué un don nadie como tú interrumpe nuestra conversación? Es cierto que no soy rival para él, pero aún puedo matarte con un chasquido de dedos.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread