Faustino estaba tan aturdido que sus piernas cedieron y se dejó caer al suelo.
Matarlo era pan comido para Jaime. Jaime podía incluso destruir todo lo que Faustino poseía. Solo era cuestión de que Jaime quisiera hacerlo o no.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread