Gaetano había pensado al principio que Jaime no estaba haciendo nada debido a la falta de un caldero de píldoras.
—Señor Soto, no se preocupe. El Señor Casas aún no ha empezado porque está confiado —Gamaliel intervino cuando vio a Gaetano a punto de prestarle su caldero de píldoras a Jaime.
Obtiene más cupones de libro que los de la appRecargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread