Capítulo 2395 Hasta tu padre recibe una paliza

Era la primera vez que alguien desafiaba a los Cardenales en su territorio. Siendo la organización de artes marciales más fuerte, que albergaba a innumerables y poderosos luchadores. Con el regreso del Brigadier Divino y los generales divinos saliendo por fin de su entrenamiento solitario, los mejores guerreros de los Cardenales estaban listos para luchar en cualquier momento. Cualquiera que se atreviera a cruzarse en su camino sería aniquilado de inmediato. Justo después de la llegada de Leandro, innumerables guerreros salieron y lo rodearon. Eran depredadores furiosos que estaban dispuestos a destrozar a su presa. En especial Benedicto que estaba furioso, ya que Leandro insultó a su padre. —¡Maldito seas, Leandro! ¿Crees que no hare nada? Mátenlo.