—Exacto. Al fin y al cabo, los jóvenes tienen que interactuar más entre ellos.
A medida que más y más personas intentaban presentar a su hija a Remus, las señoras acabaron por adivinar de qué se trataba la fiesta de cumpleaños. Así, todas miraron con timidez a Nicholas y Kieran, aunque la mayor parte de la atención se centraba en el primero. Al fin y al cabo, se sentían atraídas por el aura fría e indiferente de Nicholas, algo que le faltaba a la naturaleza accesible y amable de Kieran. Sin embargo, Nicholas ni siquiera se molestó en mirarlos a pesar de su interés por él.
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