Capítulo 438 No es un buen partido
«Es un hecho que nada podrá cambiar», lanzó una mirada provocativa a Saúl. «No importa qué trucos intente hacer, Lucas y Luna siempre serán mis hijos», pensó.
—Los niños ya tienen hambre. Vamos a comer primero —Cintia observó sus miradas excepcionalmente compenetradas y, con marcada atención, los interrumpió.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread