Capítulo 362 No es irrazonable
Solomon enarcó una ceja. Estaba algo sorprendido de lo bien que Cintia comprendía la situación, y sabía que sus peticiones no eran descabelladas. Aceptó una vez más.
—Una última cosa... —Cintia miró a Solomon—. Me gustaría mantener una petición en reserva. Si llega un día en que necesite su ayuda, y está dentro de sus posibilidades, espero que me eche una mano.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread