Capítulo 762 Veneno misterioso
Por fortuna, Emma estaba dormida y tenía poca fuerza. Sólo le había mordido una fina capa de piel, pero aun así goteaba sangre. Abel se levantó, le limpió la herida con yodo y le puso una venda. Se tumbó a la cama y tomó a Emma en brazos.
Emma seguía en la cama a las diez de la mañana del día siguiente.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread