Capítulo 741 Destruyendo el mundo

Había varios platillos exquisitos en la mesa. Sin embargo, ya que los vampiros eran extranjeros, habían preparado el desayuno de acuerdo con sus costumbres. Por fortuna, Su Luoli no era quisquillosa con la comida, así que tomó un pan tostado y comenzó a comer. Se preguntaba en dónde la estaba buscando Wen Qingmu en ese momento, y esperaba que sus hombres pudieran encontrar el hilo rojo pronto para que pudieran seguirlos. De otra manera, sería como buscar una aguja en un pajar. La puerta se abrió de nuevo y Su Luoli se alarmó un poco, pero no dejó de masticar. Era el hombre de hace un momento.  —Como era de esperarse de la esposa de Wen Qingmu. Puede desayunar tranquila en un momento tan crítico.