Capítulo 280 La verdad al descubierto
Armando no podía creer que Clotilde estuviera dispuesta a hacer eso por él.
—Es sabido por todos que, una vez infectado con el virus K, uno sufría una fiebre persistente. Este hecho levantó sospechas porque aquella noche, todos los que visitaron a la Familia Farías regresaron a casa en buen estado de salud. Sólo después de que se marcharan empezaron a aparecer síntomas de infección —dijo Clotilde.
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