Capítulo 1642 El amor y el odio son intercambiables
Todos los demás asumían que la personalidad predeterminada de Lucía era inocente y débil. Solo él conocía la forma desquiciada y socarrona en que las comisuras de sus labios se curvaban cuando se sentía acorralada, así como la alegría que mostraba cuando se encontraba en el camino de la autodestrucción.
Tomás siempre creyó que podría olvidarla. Después de todo, había muchas mujeres diferentes en el mundo. Mujeres hermosas con las que alguien de su estatus podría relacionarse. ¿No debería ser fácil olvidarla? Sin embargo, el corazón no siempre sigue la lógica, y Lucía se había enraizado profundamente en su alma, como una melodía persistente que se niega a desvanecerse.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread