Capítulo 140 No pude soltar porque lo amaba
Sofía no esperaba ver la cara de Alejo cuando se despertó.
Pensó que estaba alucinando, pero después de cerrar los ojos y volver a abrirlos, la cara de Alejo seguía mirándola con una expresión extraña. El hombre enarcó una ceja hacia ella. Tenía un aspecto diabólico y llevaba un jersey, combinado con unos vaqueros llenos de agujeros. Le sonrió con sus largas piernas extendidas bajo la cama del hospital, y tenía una almohada en los brazos.
Obtiene más cupones de libro que los de la app Recargar
Ir a la app de Joyread
Sigue leyendo más capítulos y descubre más historias interesantes en Joyread