Capítulo 15 La confesión

En Irlanda, el clima era muy agradable pero cambiante y en ciertas estaciones del año, inestable; podría decir de manera exagerada que algunas mañanas se hacía presente un sol radiante, y al cabo de unas horas podría sorprenderte un cielo nublado, y en cuestión de minutos te veías empapada de lluvia, por lo que siempre llevaba conmigo, un cortaviento en el bolso, para estar preparada. El no poder intuir lo que vendría en el transcurso del día, me hacía reflexionar en lo eventual que nosotros como seres humanos somos. Dicen que la vida es fácil, y que nosotros nos encargamos de hacerla complicada ¿Hasta dónde será verdad este mensaje? No tenemos el poder de adelantarnos a las cosas que van a ocurrirnos. A medida que los años pasan, nuestra existencia se vuelve compleja, por sí sola. Lo bueno y lo malo se presentan ante nosotros, sea cual sea la perspectiva desde la cual miremos, en ambos casos pueden convertirse en una pesadilla. Hagas el bien o hagas el mal, se deben asumir irremediablemente las consecuencias de nuestros actos.